jueves, 29 de agosto de 2013

POR LOS YUCALES DE PITAL

POR LOS YUCALES DE PITAL

Dr. Luis Montoya Salas
Comunicólogo

            Despunta el alba, en Pital.
Decenas de niñas y niños vestidos de azul arrastran sus frágiles pies por los empedrados, polvorientos o embarrialados caminos que, de los pueblos circunvecinos, confluyen en la Escuela Clemente Marín Rodríguez.
En ese mismo instante, algunos peones aplican plaguicidas a los sembradíos de yuca y piña colindantes con la calle principal.
            Tres niños descienden de una motocicleta conducida por su madre. Ella les marca  la bendición en sus frentes. 
Siete varoncitos  brincan desde el cajón de un camión cargado de  piña.  Susana, de 12 años, lleva  a  su  hermanita de escasos 6 años en la barra de la bicicleta.  Y al filo de las 7 a.m., Ernesto, de 11 años,  entrega en el aula de materno, a sus dos gemelitas.
            254 alumnos asisten a esta  escuela, distante 2 kilómetros del centro de Pital. La mayoría no puede contener el ansia que les produce el hambre ; y cada cuanto preguntan insistentes, a las maestras, por la « hora del comedor ». En cualquier caso,  será el único alimento que prueben durante el día, siempre que la Junta de Educación reciba a tiempo el depósito electrónico de DANEA.  De lo contrario, como  acontece tantas veces, regresarán resignados a sus casas, degustando las  quemantes punzadas del hambre.
Ante la ausencia de compromiso del municipio sancarleño y de los diputados alajuelenses, los educadores,  padres de familia y vecinos resuelven como mejor pueden los problemas de infraestructura y la carestía de materiales didácticos de este centro educativo. Así, por ejemplo, el gimnasio y la segunda planta de la biblioteca del Colegio Técnico Profesional de Pital fueron construídos con aportes de la comunidad.
            Pital aporta una cuota significativa a los ¢12 mil millones anuales que exportó todo el Cantón de San Carlos el año pasado, gracias a la mano muy barata de los peones (nicaragüenses, la mayoría de ellos)  que cosechan la  piña y la yuca por hora, por caja o por bulto (para  economizar costos).
En tanto, la deteriorada red vial de este distrito sancarleño revela  una distorsión de las prioridades, tanto de la Municipalidad,  como del CONAVI. Aunque el pésimo estado de las rutas nacionales y locales encarezca el valor del producto puesto en las empacadoras…
Por otra parte, los millonarios ingresos municipales obtenidos de los impuestos no se traducen en zonas recreativas, ni en un mejoramiento de las condiciones de vida de los pitaleños.  Todo lo contrario.  La  pobreza  es tan profunda,  como el verdor de los extensos yucales y piñales y de los frondosos árboles que bordean  ríos y  quebradas. Y la droga se apodera gradualmente de todo el distrito, al mismo tiempo que se multiplica la pobreza.
            Y mientras los pitaleños ven transcurrir sus días entre juegos de naipes y tableros ; entre la monta y lazado de toros ; entre campeonatos intervecinales de fútbol ; el buceo en busca de la carpa y la tilapia y los tradicionales paseos domingueños a las pozas de ríos como el Tres amigos y el Toro (cuyo cauce estuvo desviando una poderosa compa ñía extranjera exportadora de piña), de la Clemente Marín se roban libros y electrodomésticos comprados con rifas de a ¢200 el numerito.

miércoles, 28 de agosto de 2013

PARA APRENDER A LEER LA PRENSA

LECTURA(S) DE  LA PRENSA
Luis  Montoya Salas
Comunicólogo

Para algunos, las noticias diarias constituyen una obsesiva necesidad. Para millones, sólo una curiosidad. Para los menos, una lucha permanente contra el tiempo, contra la muerte.
Y aunque la construcción coyuntural a partir de hechos noticiosos acumulados de manera pertinente (denominada “universo” y “corpus”) le permite a los estrategas políticos y dirigentes de todo orden y estamento construir escenarios de la realidad nacional para tomar decisiones mejor fundamentadas que la simple intuición, la inmensa mayoría de los consumidores de noticias las usamos (salvo excepciones), como el dinero: Realizamos cientos y miles de transacciones durante nuestra vida útil, sin conocer sobre finanzas o economía. De igual manera, leemos la prensa, escuchamos  las noticias radiofónicas y miramos la TV: ignorando los procesos técnicos e ideológicos involucrados en la construcción de cada hecho noticioso.
Recurrimos a la prensa, por principio y por costumbre. Y escogemos los “media” que coinciden  con nuestros sentimientos,  estados de ánimo y concepción del mundo. Tal actitud nos impide “leer”  las estructuras subyacentes, existentes por tanto, en  los medios informativos.
Esta característica de la prensa afecta, sin duda, a los expertos que deben trazar estrategias de mediano y largo plazo combinando tendencias coyunturales, circunstanciales y estructurales de determinados acontecimientos, con las evaluaciones sincrónicas que proyectan  las encuestas de opinión, sobre  esos mismos fenómenos.
TEXTO, PRE TEXTO, CONTEXTO; COYUNTURA, ESTRUCTURA, CIRCUNSTANCIA, INDICADORES PARA EL ANÁLISIS DE CONTENIDO
Existen disciplinas de las Ciencias Sociales que desarrollaron técnicas y herramientas rigurosas, a las cuales se puede recurrir en los casos antes apuntados. La semántica, por ejemplo, indaga la correlación existente entre la circunstancia, la estructura, la coyuntura, el contexto y pre-texto informativos, con el significado de las imágenes y palabras usadas en  títulos, bajadillas y “cuerpo” de las noticias, trátese de la prensa, la radio y la televisón.
SEMIÓTICA, ANÁLISIS DE CONTENIDO,  ANÁLISIS MORFOLÓGICO
A la semiótica, más cercana a la praxis de vida, le preocupan, entre muchas otras, las implicaciones psico-sociales sobre la cotidianidad de los ciudadanos, derivadas del consumo de los hechos noticiosos.
Y al análisis de contenido, incluidos el análisis morfológico y otras derivaciones (retórica estructural y funcional), le corresponde abordar  volúmenes significativos de noticias, para demostrar lo ya intuido; o para conocer la génesis y efectos de  determinados fenómenos dominantes en las agendas de los medios de difusión colectiva.
Estas técnicas y herramientas se nutren, precisamente, de la naturaleza perecedera de los hechos noticiosos. Los consumidores de noticias no están obligados a almacenar noticias como parte de sus preocupaciones cotidianas. De por sí, no existe cerebro común capacitado para memorizar, con precisión, más allá de 6 noticias diarias.  Y por lo demás, la paradoja de la información es la de perecer, en el instante en que se difunde y es sustituida por otra. (analogonluis@yahoo.es)

lunes, 26 de agosto de 2013

EL MEJOR CAFÉ SABE A POBREZA QUE DUELE


¿CAFÉ NEGRO? O CON LECHE…


Luis Montoya Salas
Comunicólogo


          Quizás un hogar; u otro trabajo estacionario esperan a los cogedores, luego de más de tres meses de compartir con los cafetos, su soledad.
            En los bolsillos cargan la paga; pero también, las humillaciones,  la explotación laboral y sexual (en el caso de las mujeres, a cambio de los mejores cortes cargaditos con el grano de oro) ¡Chantaje sexual!
            En Cañuelas de Naranjo, un finquero retiene a  “paisas” y ticos parte del salario ganado con sudor y sangre, para que no deserten antes de la repela, que es la última fase de la cogida.
Una señora nicaragüense de 65 años perdió 25 mil colones, porque no pudo continuar con el corte que le asignaron, en un “guindo.”
Otros estudiantes de igual nacionalidad perdieron más de 40 mil colones, porque debieron regresar a su patria para continuar estudios universitarios. De nada les valió advertirle al patrón que debían abandonar el cafetal antes de la repela… 
            Fui testigo de las condiciones dramáticas en que vivieron once cogedores de café, entre mujeres con niños de brazo, hombres, jóvenes y niños durante ocho días, en otra finca cercana a la entrada a Naranjo. Ahí, el propietario convirtió en “baches” improvisados sus caballerizas: para dormir cinco personas, tablones pegados a las paredes, sin colchones, sobre un piso e’  tierra.  Como cocina, un estañón lleno de tierra, con un hueco para calentar la comida. La ducha colectiva era otro estañón partido por la mitad y adherido a un tubo por una manguera. A la intemperie. Y los olores apestosos del excusado e’ hueco contiguo, colándose por las hendijas, impulsados por los vientos fríos del Naranjo madrugador…
            Ya en el cafetal, después de una dura jornada de 6 horas para sacarle “el jugo” a los cafetos y con las manos callosas, maltratadas y negras de tierra contaminada con insecticidas, los cogedores almorzaban sus viandas, frías. Y para saciar la sed, agua  recogida en botellitas antes de las 6:00 a.m. hora oficial de arranque de la cogida, calentada por el generoso solazo veranero del Naranjo del medio día. 
Como tampoco existen letrinas móviles, los cogedores hacían sus necesidades fisiológicas a la vista de todos, o a la sombra de alguna “mat é plátano”, agregándole excremento, orina y basura, a los fertilizantes.
            ¿Existen idénticas condiciones en otros cafetales del país? 
¿Conoce el ICAFE, esta realidad escondida entre los cafetos? ¿Está enterado el Ministerio de Trabajo sobre la existencia de prácticas como la retención anticipada de salarios devengados?
            ¿Supervisa el Ministerio de Salud el estado de los “baches” que albergan a los cogedores, la mayoría de ellos, nicaragüenses?
            ¿Saben los inspectores de trabajo que en toda la extensión de estas fincas de Naranjo no existen tomas de agua,  ni letrinas móviles para el aseo de los jornaleros?
            ¿Permite la Constitución (por vía de excepción) estas prácticas, por tratarse de trabajadores estacionarios?
O ¿intervendría la Sala Constitucional, a favor de los cogedores de café, con fundamento en los artículos 33 y 56 de la Constitución Política, que protegen contra todo tipo de discriminación y garantizan el trabajo honesto, útil, debidamente remunerado y ejercido con libertad, dignidad y contrario a la degradación de la condición humana?
            Cercana la media tarde y después de recibir el jornal según el número de cajuelas, los cogedores regresan a sus “baches”. Encienden fuego y preparan el café, negro o con leche, mientras comparten las incidencias del día, acostumbrados como están a vivir en condiciones  infrahumanas…

domingo, 25 de agosto de 2013

QUIZAS NO ME CONOCE, JHONNY ARAYA. SI ME QUIERES CONOCER, VILLALTA...

EL MEJOR MÉTODO DE HACER POLÍTICA: NO MAQUILLAR LA MENTIRA

Luis Montoya Salas

El “espíritu de los tiempos” nos indica que la forma de hacer política tradicional terminó.
Si de acuerdo con algunas teorías de la comunicación política, la imagen de un líder político se gesta mucho antes del arranque oficial de los procesos pre y electorales.
Pero no basta con llevar camino andado. Pues en asuntos electorales cualquier frase dicha al vuelo y de manera no- pertinente provoca impredecibles traspiés.
Hoy, el monstruo apocalíptico creado a partir de hipotecas “basura” por la avaricia de banqueros norteamericanos y transnacionales obliga a sustituir las frases estereotipadas de antaño por planteamientos rigurosos, propuestas creativas, mensajes comprometidos que alienten a los ciudadanos en su necesidad de salvaguardarse emocionalmente de la incertidumbre mundial. Por tanto; ahora, cuando por primera vez en  nuestra historia, los costarricenses  enfrentamos, con dureza y estoicismo extremos,  un estado cataléptico que nos es completamente ajeno a la espera anunciada del colapso, la única opción posible de estrategia electoral es dirigir recursos materiales, humanos, cognoscitivos y tecnológicos  para confortar a los electores suministrando antídotos  verbales en forma de mensajes cargados de  optimismo que nos  protejan del miedo paralizante muy propio (como defensa primitiva) de los tiempos convulsos e inciertos de este nuevo milenio.
Resulta entonces  obsoleta y onerosa, la tendencia narcisista de los precandidatos de dirigir los recursos económicos de campaña, en la construcción a partir de CERO  de su figura e imagen,  para lo cual también el tiempo se agotó. Antes fue Jhonny Araya con su “Quizás usted no me conoce”. Ahora, Villalta sigue la misma ruta. “Si usted no me conoce, entonces…..”  En una economía de recursos y de tiempo, los candidatos deben partir de la premisa que ya existe un conocimiento previo de su figura, nombre y partido.
Cada centavo invertido en propaganda vale su peso en oro, como para desperdiciarlo en  frases vagas que  poco  le aportan a  un  pueblo sediento de  respuestas firmes y contundentes,  en labios  de quienes postulan su nombre al más alto cargo del país: la Presidencia de la República.

miércoles, 21 de agosto de 2013


 EL ARTE DE MANIPULAR LA NOTICIA CON TÍTULOS HIPOTÉTICOS
Dr. Luis Montoya Salas
Comunicólogo

El 17 de agosto recién pasado, CR. Hoy, medio informativo electrónico tituló “ESPOSA DE JHONNY ARAYA ELEGIRÁ DIPUTADOS”. El 1 de junio de 1998, el periódico La Nación tituló: “EX – SOCIO DE FISHMAN LIGADO A CAPO”.
Ambos títulos tienen en común utilizar partes irrefutables de la noticia y asumirlas en el título como un todo verdadero, cuando:   si algunas partes de la noticia son irrefutables, no necesariamente el título lo es. Y por el contrario, existen más posibilidades que  el título sea hipotético. Pues en periodismo no se aplica la ley de la Psicología de la Gestalt según la cual  “El todo es más que la suma de sus partes”.
El presente ensayo procura  demostrar que existen procedimientos propios de la naturaleza periodística de la puesta en forma final de una noticia susceptibles de inducir a una percepción errónea de la verdad.
La función de anclaje de los títulos y las ilustraciones
La Psicología de la Percepción estudió profusamente el efecto y resultado de la distribución de los elementos en un espacio determinado. Y para el caso del material impreso demostró, entre otros principios:
1.       La parte superior  y derecha (de cara al perceptor) son jerárquicamente las de mayor valor.  Y esto, por cuanto en la cultura occidental leemos de arriba hacia abajo y de izquierda a derecha.
2.       Un texto (título) adquiere mayor valor y jerarquía en el marco de una información si cuenta con una ilustración.  Así, la ilustración es una prolongación visual del texto, lo complementa y lo refuerza. Por otra parte, la ilustración rompe la monotonía de un texto abundantemente  idéntico perceptualmente. La  ilustración cumple un principio elemental de la información y es el de agregar algo diferente, inédito al texto mismo.   La ilustración juega entonces el papel de pretexto para el texto. Y en este siglo de la imagen resulta inadmisible que una noticia o reportaje no se complemente con fotografías o ilustraciones.
3.       De acuerdo con la Psicología de la Gestalt,  las formas (título, texto, pie de grabado) son percibidas como una totalidad, aportándole una alta dosis de redundancia que refuerza la  función persuasiva de cada parte, por separado.
4.       Los títulos cortos (no más de 7 palabras) redactados con palabras simples, las más usuales y más cortas parecen poseer una cualidad de “atrapar” al perceptor y son reconocidas más fácil y rápidamente. (F. Richaudeau: Le langage efficace. P. 37)
En una página impresa de periódico existen tres elementos estrechamente entrelazados e interdependientes: El título, las fotos con sus pies de grabado y el texto  de la noticia o reportaje. 
Cada uno de ellos cumple una función específica:  El título es el QUÉ de la noticia llevado al extremo de su síntesis. Entre más breve, más eficaz para los efectos de capturar, atraer la atención y memorizar el mensaje. En tal sentido, la psicología de la gestalt le da sustento empírico a la práctica periodística de titular: las palabras más simples, más usuales y más cortas parecen poseer una cualidad de “atrapar” al perceptor y son reconocidas más fácil y rápidamente. La razón es simple: el título aplica la ley del mínimo esfuerzo del perceptor. Las imágenes fotográficas cumplen una función de redundancia respecto del título reforzando así, el efecto persuasivo pretendido por el jefe de información del medio periodístico. Lo que dice el título debe estar plasmado en las fotos que lo ilustran para hacer innecesaria la lectura del texto.  Y esto, aplicando nuevamente la ley del mínimo esfuerzo.
Nuevamente recurro a la psicología de la percepción y los estudios extensos realizados sobre la tendencia del ser humano a percibir las formas como totalidades. En el caso del título, las fotos y el texto estos son percibidos globalmente; y con mayor énfasis, el título y las fotos porque rompen la monotonía de la composición visual de una página abundante en texto.  Esto explica por qué basta al perceptor con leer el título y apoyarse en las ilustraciones gráficas para asumir que leyó la totalidad de la noticia.  La función subyacente  del texto o cuerpo de la noticia es demostrar, per se,  la veracidad del título y de las fotos. Y si logra que el perceptor no continúe leyendo la noticia habrá alcanzado su objetivo, aunque parezca paradójico.
Dos casos de especie para ilustrar la teoría   
La Asociación Internacional para la Investigación  Interdisciplinaria de la Comunicación propone las siguientes categorías para establecer el grado de certeza de los intercambios de comunicación: Los hechos irrefutables, los hechos probables, los hechos hipotéticos y los hechos falsos.
Cada una de estas categorías no son absolutas en sí mismas, aunque se fundamentan en  6 preguntas elementales:  ¿Quién? ¿Qué? ¿Cuándo? ¿Dónde? ¿Cómo y para qué? enunciadas por Quintiliano hace más de 2000 años.  Cada una de ellas encierra más que un acto mecánico, una profunda ideología  pues  “se inscriben en el núcleo mismo del SENTIDO COMÚN, instrumento inherente al ser humano, con el cual percibe las señales del devenir cotidiano  y toma sus decisiones” (Montoya Luis:  Prensa y Parlamento. (Pp. 22-25. Año  2.000 Documento inédito). Así, por ejemplo,  el Quién de Quintiliano no es tan inocente:  “En el quién de la fuente subyacen representaciones simbólicas del poder, que el periodista adapta a su personal y propia imagen. Esta  relación biunívoca: fuente (que también percibe estímulos lanzados por el periodista) y periodista definirá, en buena medida, los niveles de veracidad y calidad de los hechos” (Montoya, Luis, ob. Cit. P. 23).

“ESPOSA DE JHONNY ARAYA ELEGIRÁ DIPUTADOS”.
En  6 párrafos, de los cuales sólo uno hace referencia a la ex esposa de Jhonny Araya, el redactor de esta noticia envía un mensaje subyacente: “Esposa de Jhonny Araya será candidata a diputada.
En estricto sentido,  Sandra León, esposa del candidato presidencial liberacionista representa un solo voto entre 247 que constituyen la Asamblea que elegirá a los diputados.  No obstante, la semántica del texto  en el plano de las significaciones (denotaciones + connotaciones) le asigna a esta delegada un poder superior al de los 246 delegados restantes. Así, una sola persona que no es siquiera el candidato representa, de acuerdo con el título de la noticia, la suma absoluta de todas las partes que componen la asamblea, también con un poder absoluto sobre todos los delegados. Es cierto, sí, que Sandra León forma parte de la Asamblea que  elegirá a los diputados. Pero es falso que ella sea la única, con la exclusión de todos los demás con el poder que le otorga el título periodístico.( Aclaro que en estricto sentido semántico, es correcto hablar de título y no de titular, que tiene otra connotación).
En el plano de las connotaciones subyace una intención del medio de sancionar el autoritarismo del candidato Jhonny Araya al nombrar a dedo  una persona con menos méritos  trayectoria  y compromiso partidario, con el único argumento de ser su  esposa.  Esto revela, aplicando una lógica simplista, que la esposa de Jhonny Araya ejerce hoy sobre el candidato  un poder real  similar al que tiene la esposa de Daniel Ortega, Presidente de Nicaragua, con todas sus implicaciones, si llegara a la presidencia.
Esta es, en síntesis, una forma del periodista de materializar su ideología subyacente respecto de lo que piensa sobre el acto arbitrario por parte del candidato presidencial liberacionista al nombrar “a dedo”, a su esposa como integrante de la Asamblea.
“EXSOCIO DE FISHMAN LIGADO A CAPO”.
Este caso es más delicado por sus implicaciones políticas y legales. Y revela una posición de política editorial (aclárese que no es línea editorial)  del medio informativo.  Aquí, las 355 líneas de texto del cuerpo de la noticia son ciertas, en sus párrafos; pero no sustentan el valor irrefutable del título. Fishman fue socio de un ex – socio de José Nelson Urrego Cárdenas, sin el adjetivo peyorativo  de “capo”, cuyo significado no  explican las dos periodistas responsables de lo que ellas llaman “INFORME ESPECIAL”.
Por otra parte, en el momento de la publicación, Luis Fishman, a la sazón Presidente de la Asamblea Legislativa no tiene ningún ligamen empresarial con el ex - socio del ex - socio  Urrego Cárdenas. Pues “tan pronto se enteró de sus nexos  vendió los títulos y renunció al puesto de presidente (…)
Aquí, el reportaje no tendría ningún valor periodístico si no es por la figura pública de Luis Fishman en calidad de Presidente de la Asamblea Legislativa. Ex – socio, ya lo fue. No lo es en el momento de publicación del reportaje. Y las periodistas mismas así lo afirman. No obstante, tienen un abundante material investigativo que deben difundir.
Como se indicó en párrafos anteriores, la composición gráfica del conjunto:  título EXSOCIO DE FISHMAN LIGADO A CAPO;  fotografía en recuadro de Urrego Cárdenas;  otra de una inmensa construcción hotelera valorada en $50 millones a la par de la fotografía de Luis Fishman cumplen la función gestáltica de impresionar la percepción de los lectores quienes realizarán la síntesis, en forma de silogismos: Los perceptores asociarán: Fishman – capo – hoteles - riqueza, Miami - inversión, millones de dólares.  El resto sería voluntad de los perceptores de corroborar  el valor irrefutable del título.
Para contrarrestar las implicaciones del “INFORME ESPECIAL”, las periodistas se cuidan de entrevistar al implicado, quien sale muy mal librado de la entrevista, al punto de perder el control cuando descubren su ingenuidad, descuido y falta de profesionalismo imperdonables en un abogado con su experiencia y conocimientos.  Pero aun con la entrevista, las periodistas solo pueden titular vagamente, pues en estricto sentido, no pueden demostrar nada más que una duda razonable del  vínculo de Fishman con un ex – socio de otro ex – socio.
Ahora bien; si como está demostrado en teoría periodística: “El material impreso lleva consustancialmente el sello de la verdad. Y esto es cierto con mayor razón  si ya existe en el imaginario colectivo una praxis de consumo de noticias paralela al grado de credibilidad que les merecen sus medios informativos” (Montoya, Luis: ob cit.),  esta publicación tuvo daños directos y “colaterales” sobre la imagen pública del diputado Luis Fishman. No se prueba, no se demuestra nada, pero queda sembrada la duda. 
Algunos apuntes conclusivos:
En la comunicación humana interpersonal, el periodista no puede desprenderse de su ideología: prejuicios, intereses, intenciones. Y a diferencia de sus fuentes tiene el poder de determinar el resultado final de su trabajo periodístico con sus implicaciones a posteriori, sobre la fuente que le nutrió de información. Dicho en concreto: en algunas ocasiones, el periodista utiliza un hecho noticioso como pre-texto para exteriorizar su propia visión respecto del hecho y del o los personajes involucrados.
Y esto es posible, porque el perceptor desconoce tanto la coyuntura como la estructura   de los hechos noticiosos que consume. Y el periodista no cuenta con espacio ni tiempo  (y quizás de conocimiento) para contextualizar a sus perceptores.  Esto no significa que tanto la coyuntura como la estructura deban someterse al poderoso devenir de las circunstancias propia de las noticias. La coyuntura, por ejemplo es tan dinámica como los hechos noticiosos mismos. Podemos lograrlo, distanciándonos de la apariencia (retórica) que envuelve al hecho noticioso y desmenuzarlo en los componentes esenciales de orden político, económico, ideológico, en suma, de las instancias del poder.
El periodista, quizás más que ningún otro profesional debe contar, entre sus cualidades, características, actitudes y aptitudes, con  un sentido del equilibrio emocional tan fuerte que no sucumba ante las arremetidas emocionales de sus fuentes de información, ni quede subyugado por  la impresión perceptual de poder que emana de algunas de aquellas.
En cuanto a los perceptores, deberían ejercitar  aunque sea empíricamente su percepción para identificar los casos de información tendenciosa y sospechar, siempre, de la orientación y sentido de las noticias.
El diagrama revela que las interacciones son de orden empresarial, no de tráfico de capitales ni lavado de dólares.



viernes, 16 de agosto de 2013

ESCAPARATEJISMOS

“ESCAPARATEJISMOS”
Luis Montoya Salas
Comunicólogo

            No existen asesores en comunicación e imagen. Sólo constructores de escaparates simbólicos.
Erigidos en casta de expertos  en el clímax del  siglo XX (calificado por J.F. Arnaud como el “Siglo de la Comunicación”), reciben sumas millonarias elaborando textos e imágenes para distraer a cientos y miles de individuos ocupados en preocuparse por sus penurias económicas, sus necesidades afectivas, sus expectativas de futuro (si es que alguna tienen) y sus inseguridades ciudadanas.
Su  éxito se alcanza cuando,  ignorante de la sutil telaraña de la coerción social que la envuelve; y con “el placer de la obediencia y la subordinación” (Adorno), la colectividad acepta participar en los “mercados simbólicos”; en la consolidación del “poder simbólico”; nutre, sin percatarse, los “prestigios simbólicos”; fortalece las “economías simbólicas”; participa de las “tradiciones simbólicas”; lucha por apropiarse de los símbolos sociales, o urbanos (…) (Bourdieu y Passeron).
Aunque Paul Watzlawick  nos recuerda que “comunicación y existencia son dos conceptos inseparables”, para estos hacedores de signos  las preocupaciones de los ticos son responsabilidad de  los hogares, si se trata de bienestar material y emocional;  de los educadores en las aulas, cuando está en juego el futuro profesional; de los curas y pastores, cuando el  asunto es de almas perdidas, pecados cometidos y eterna salvación. Y si los casos son extremos, que intervengan los terapeutas.
Y cuando Watzlawick de nuevo escribe: “El hombre no puede trascender los límites impuestos por su propio espíritu (…)”, nos advierte sobre cualquier pretensión de los llamados expertos en comunicación por apropiarse del conocimiento total de una actividad tan profunda y ancha en su dimensión emocional, como la comunicación humana.  
            ¿Pueden los “escaparateros” conocer, acaso, qué sucede en “la conciencia ingenua” (K. Kosik) de cada costarricense, mientras en las suyas se gesta el acto creativo del mensaje eficaz y eficiente, que logre persuadir a la opinión pública sobre la verdad de su producto de carne y hueso?  ¡No! La psicosociología les ha enseñado que “el imaginario colectivo” es la puerta de entrada al mundo de las ilusiones  de una sociedad cuyos habitantes la creen hecha a la imagen y semejanza de sus propios sueños, ideales, necesidades, problemas, sufrimientos, expectativas… y más.
Los escaparateros recurren al extraordinario poder de penetración de los medios de difusión colectiva (MDC) sobrevolando las nimiedades cotidianas y le apuestan a las encuestas como el instrumento científico más objetivo mediante el cual justifican su existencia. Conocen la eficacia de los MDC  para reemplazar las preocupaciones reales cotidianas de esas multitudes silenciosamente amorfas y sedientas de figuras míticas (lejanas e intangibles), místicas (diosas inalcanzables) y arquetípicas (modelos a seguir, pero sin compromiso). Tales mitos, arquetipos, “herencias espirituales” y “valores eternos”  (o mejor  la  superstición y la estereotipia  del equipo de la Universidad de Berkely) inciden sobre la opinión pública para expresarse luego en porcentajes de aceptación o  rechazo, de un sí o un no invisibles.
¿Existe antídoto para defenderse de los embates del escaparatejismo?  Entre otros muchos, propongo uno, al alcance de todos.   Es claro, conciso, directo y profundamente persuasivo, acuñado por la cadena de televisión TELEMUNDO en forma de slogan: “El conocimiento da poder. El poder de saber”. (analogonluis@yahoo.es)



jueves, 15 de agosto de 2013

LA HUMILDAD DE DON OSCAR ARIAS SÁNCHEZ

OSCAR ARIAS LO TUVO TODO PARA SER ESTADISTA, MENOS LA HUMILDAD

Luis Montoya Salas
Comunicólogo

Oscar Arias, ex –presidente de Costa Rica lo tuvo todo. Nació en cuna de oro. Estudios en las mejores escuelas y colegios y un doctorado en una de las universidades inglesas más prestigiosas. Es hoy, a sus 72 años uno de los hombres más ricos y poderosos del país. Pero le falta lo que al Papa Francisco le sobra: la humildad.
Tan grande es su vanidad, orgullo y prepotencia, que desearía estar solito en el Salón de los Ex presidentes de la Asamblea Legislativa, según su propias palabras recogidas en La Nación del 14 de agosto recién pasado en la develación de su retrato: “Me preocupa el espacio en blanco, los retratos que aún faltan por colgar”, en alusión directa a la primera mujer costarricense presidenta de La República y sugiriendo que nadie podrá ser mejor que él y que le duele, en verdad, compartir su digno retrato de alcurnia con la chusma, aun sea en su tumba .  Según sus propias palabras: “Estos hombres (refiriéndose a los ex presidentes anteriores a su gestión) han forjado la historia que yo, con la ayuda de miles y miles de costarricenses he forjado la mía. ¿Cuál es su herencia? Las privatizaciones, el TLC, un país totalmente enjaranado, el descalabro de la CCSS, la escalada de la corrupción. De sus obras no seré yo quien dé cuenta pues el máximo presidente no necesita escribientes. Y a los jóvenes les recetó de su propia medicina, aunque ya hubiera olvidado lo que fueron sus campañas políticas. “A los jóvenes que incursionan en la política, “no se dejen vencer  por los cínicos, los demagogos, los que hacen del debate político un lodazal”. 
Sin embargo, hay un detalle que nunca imaginó que surgiera al final de sus días: el despojo que de todas sus tierras guanacastecas, suyas y de sus parientes podría llegar a ejecutar el presidente nicaragüense Daniel Ortega, si cumple su promesa de iniciar esta lucha que, cuidado y si no, con la élite de abogados que tiene a su servicio y que le han permitido ganarle territorio marítimo a Colombia y tiene en jaque a las autoridades ticas sobre este mismo tema.

martes, 13 de agosto de 2013

EL SUEÑO DE LA SERPIENTE


EL SUEÑO DE LA SERPIENTE

Luis Montoya Salas
Comunicólogo

De una cama de hospital rural levantaron un 19 de diciembre, el cuerpecito de 4 libras. Hembra.
A los 4 años, unos parientes lejanos la internaron en un orfelinato de la capital aduciendo la muerte de sus padres. Ahí fue sometida a estrictas reglas disciplinarias que incluían madrugar todos los días; hacer fila para ingresar a la capilla; para almorzar y cenar; para recibir los regalos en Navidad; para ir a la escuela; y hasta para ingresar al cine todas las navidades, cuando los propietarios de dos cines de la capital estrenaban películas de Walt Disney.
Sólo existía un día en la vida de aquella niña en el que esperar valía la pena: cuando llevaban al circo a los niños del orfelinato, generalmente durante las vacaciones de medio período. Pues siempre que llegaba un circo al país, los 200 niños del hospicio asistían a una función realizada exclusivamente para ellos, como acto de caridad. Lo que  hoy llaman “responsabilidad social”.
Este régimen le dejó escasas oportunidades para disfrutar, con alegría, de su niñez. Sus ojos adquirieron, gradualmente, el sello de la tristeza que marca la orfandad.
A los 12 años fue adoptada por los dueños de un circo ruso, luego de observar en ella características físicas y carisma que la hacían sobresalir de entre todos los niños del orfelinato, para quienes este circo había realizado una función exclusiva. En esa época, los requisitos de adopción eran responsabilidad exclusiva de las autoridades del hospicio. Y cada vez que lograban entregar en adopción a alguno de los cientos de niñas y niños institucionalizados celebraban el éxito con oraciones y lo anunciaban en el acto público de celebración del aniversario del martirio de San Vicente de Paúl.  
“Casi siempre, aunque esté rodeada de muchas personas, siento la misma sensación de soledad que en el hospicio. Es como si la llevara por dentro, escondida en mi pasado y que no logro calmar ni con mis recuerdos de infancia, cuando vivía con un montón de primillos en una casita piso e´ tierra y con su techo tan lleno de huecos que, cuando llovía afuera, no había diferencia adentro. Veo tan lejanos a mis papás, tíos, abuelos, sentados conversando y riendo a grandes carcajadas bebiendo y envueltos en una humareda que les salía de la boca”. Esto me contó Evelyn, una de las tantas veces que conversamos en el night-club “El Escorpión”. “Y lo más raro”, acotó, “nunca recuerdo haber soñado. Pero hace una semana soñé con una serpiente y no he logrado quitármela de la mente”.  
Y al igual que en otras veces cuando habíamos conversado, Evelyn tenía una melancolía mística. Pero en esta ocasión, sus ojos estaban intensamente teñidos con el rojo irregular de las venillas irritadas y sus pupilas parecían astillas de vidrio que acusaban quizás, un estado extremo de intoxicación  por el  cruce de droga y alcohol.
Evelyn me pidió que la invitara a un trago grande de guaro y a dos cervezas. Entre sorbo y sorbo me narró su sueño:
“Estaba acostada en una cama matrimonial de metal con su colchón de resortes, obsequio de una amiga de 28 años que murió de cáncer de mama. El cuarto era oscuro y desde la ventana apenas cubierta con un pedazo de mosquitero se escuchaba el ronroneo de un río. Me asomé debajo de la cama y miré una cantidad de monedas ordenadas en pequeñitas torres de 5, 10,  25, 50, 100 y 500 colones que sumadas daban 3.580. Me extrañó que estuvieran ahí, pues yo las guardaba en una cajita de plástico dentro de mi ropero. Las torrecillas estaban rodeadas por una pequeña víbora que las custodiaba. Como parecía estar dormida extendí la mano para alcanzar las monedas pues las necesitaba para comprar mi desayuno. Pero al instante, una inmensa cabeza de serpiente me saltó justo en la cara, a escasos centímetros mostrándome sus colmillos y su lengua viperina que mojaba mis ojos con babas. Tan grande fue el susto que me desperté al instante y me encontré tirada en el suelo” De seguido me confesó que desde entonces empezó a sentir una desesperación por robarse uno de estos especímenes para recuperar su dinero.     
Yo, con pose profesoral, la escuchaba y observaba su comportamiento gestual, asombrado por su capacidad para trascender el sueño y sentirse contagiada por su esencia, al punto de trasladar su desenlace a la vida real.
Más tarde comprendería la razón por la cual Evelyn vivía y soñaba la obsesión por las serpientes. Por el momento me preocupó que este curioso interés ocultara alguna intención subyacente.
Evelyn se acercó a la tarima con una caja grande cubierta con papel crepé como el que se usa para los regalos y la colocó en un rincón de la tarima. Subió los tres peldaños al tiempo que las notas de Clyderman se deslizaban sobre la pista.
La hembra bailó de cara a los espejos, en contorsiones suaves, bien apuntaladas, hacia adelante, hacia atrás, hacia los lados, hacia abajo, en círculo… De cuando en vez, daba la cara al público y tiraba una prenda.
Cuando estuvo completamente desnuda, corrió en pasitos cortos hacia la esquina. Sacó de la caja una gran víbora y se la enrolló en el cuerpo para cubrirse los senos y los genitales. El “baile de la serpiente” era el show exclusivo de Evelyn en el night-club y su principal atractivo.
Lo que siguió no estaba en el libreto y esto preocupó al gerente quien corrió hacia la tarima. Evelyn cayó de rodillas. Desde sus entrañas y más allá, lanzó un grito largo, profundo, como liberándose del dolor de cargar durante tantos años, cientos de misas, letanías, filas, horas eternas de silencio y privaciones atornilladas en sus hombros. Se irguió veloz, tiró la serpiente al piso y puso sobre ella el pie derecho emulando a la Virgen Poderosa a quien desde niña le rezó tantas veces “Así hizo la Virgen Poderosa con el demonio. Yo declaro victoria en contra de mis demonios del pecado que me atormentan sin razón”.  
Evelyn tomó a la víbora por la cabeza y la lanzó con fuerza hacia una mesa cercana a la tarima. Los clientes creyeron que esto formaba parte del show. Pero algunos  corrieron hacia la única y pequeña puerta de entrada-salida del lugar. Un miembro de la seguridad inmovilizó a la víbora con una red para pescar usada como decoración del local. Y el gerente subió a la tarima, cubrió a Evelyn con una cobija llena de huecos y la llevó al camerino.
A los pocos minutos, Evelyn levantó la cortina roja del camerino que separaba la miseria de las bailarinas de los goces de sus clientes. Y con un caminar de modelo de pasarela, con sus ojos que saltaban de un lado a otro y de abajo al infinito se acercó a mi mesa, como si nada hubiera ocurrido. “Si me invitas a un trago te cuento otro sueño”.
Con la frase “¿Te parece”? en sus labios, el colapso. Evelyn cayó al suelo como vástago. De manera imperceptible, la víbora utilizada por Evelyn se había deslizado hasta donde ella estaba. La seguridad del night-club sacó a todos los clientes y cerró las puertas. Vino la ambulancia; y detrás, los periodistas.  
El telenoticiario de la mañana abrió su edición con esta noticia: “Hoy, en un night-club de la capital, fue encontrada sin vida una mujer que respondía al nombre artístico de Evelyn. Según la policía, la mujer de la vida alegre habría muerto a las 3 de la madrugada, estrangulada por una boa”.
Ernestina, verdadero nombre de Evelyn, viajó por todo el mundo con el circo ruso. A  los pocos días de adoptada le enseñaron el arte de encantamiento de las serpientes. Crearon un show especial para ella que consistía en sacar dos serpientes de una caja de cristal en la que se arrastraban muchas serpientes más y lograr que la siguieran en un paseo por toda la pista del circo. En un momento determinado, Evelyn sonaba un silbato y las dos serpientes se detenían; luego de un brevísimo silencio, se escuchaban las notas de música oriental y las serpientes ejecutaban una danza al ritmo de panderetas. Otro silbido, y una de ellas se enroscaba en su  cuerpo, como si fuera un árbol, mientras la otra dócilmente entraba en la caja de cristal ante la mirada atónita de los asistentes. 
Se trataba de un espectáculo muy apreciado y exitoso, hasta que Ernestina cumplió los 18 años y debió regresar a su país para establecer su mayoría de edad. Y sucedió que en el Registro Civil Ernestina aprovechó para sacar los certificados de defunción de sus padres, pues nada sabía de ellos. Con inmensa sorpresa se enteró que los dos aún estaban vivos. Visitó el hospicio para conocer la verdadera razón de su internamiento. Y también fue a su pueblo a indagar más, aunque no visitó a sus progenitores. Ernestina había nacido con enanismo. Y en el pueblo, colonizado por descendientes de gitanos tenían la superstición que el nacimiento de un enano, peor si era mujer les traería mala suerte durante 100 años.
Esta noticia destrozó la autoestima de Ernestina. Empezó a alquilar varios clubes nocturnos de la capital para mostrar su espectáculo sólo para ser el centro de atención de los clientes. Así dilapidó el dinero que sus padres le habían guardado para cuando cumpliera la mayoría de edad y que era parte de lo ahorrado durante sus 6 años de trabajo agotador en el circo. Cuando se quedó sin un centavo regresó al circo en  Rusia su verdadero hogar. Sus padres adoptivos la acogieron, pero le dieron papeles secundarios. Hasta que el constante consumo de drogas y alcohol empezó a dañar la calidad de su espectáculo y la reputación del circo.
5 años soportó la pareja los caprichos y estados de locura resultantes de los excesos de quien fuera durante 6 años la estrella principal del circo. Hasta que un día, en un viaje desde Rusia a Perú, sus padres adoptivos la dejaron en el puerto caribeño de su país de origen.  
En este puerto trabajó en varios night-club. Al principio, el show atraía muchos clientes morbosos por ver a una enana desnuda enroscada  en una serpiente, mucho más grande que ella. Pero a los meses, Ernestina cayó de nuevo en las drogas.
En el Night-club “El Escorpión” trabajó 3 años. La soportaban porque era el único show de desnudismo en el país realizado por una enana y su serpiente.  
Ernestina cumplió recientemente 40 años de su nacimiento y 17 de su muerte… Sólo alcanzó a vivir 23 años.  (analogonluis@yahoo.es)

miércoles, 7 de agosto de 2013

PRIMERA Y ÚNICA ESTAMPILLA DE LA ESCUELA DE COMUNICACIÓN DE LA UCR. EN SU 25 ANIVERSARIO.


En el marco esplendoroso del 25 aniversario de la Escuela de Comunicación Colectiva de la Universidad de Costa Rica se imprimió el sello conmemorativo de su celebración. Esto sucedió el 19 de agosto de 1993 por gestiones personales, en calidad de su Director. Es una joya que al cumplirse pronto los 45 años de su fundación es de rigor mostrar a los cientos de egresados, profesores y periodistas afiliados al Colegio de Periodistas, pues gracias a su aporte económico e institucional fue posible, como nunca antes había ocurrido en esta unidad académica, celebrar, además,  el I y II encuentros nacionales de la comunicación que convocó a expertos internacionales como consta en documentos en mi poder y a los que tuvieron acceso los participantes de aquel memorable año.

lunes, 5 de agosto de 2013

¿PUDO JOSÉ MIGUEL CORRALES SER PRESIDENTE EN 1998?

PUDO JOSÉ MIGUEL CORRALES SER PRESIDENTE EN 1998?

Luis Montoya Salas
Comunicólogo


En la  Inglaterra de los Tudor y los Stuart de 1787; y en medio de encarnizados enfrentamientos políticos: periodistas vs. Parlamento – monarquía, quedó acuñado el precepto de la prensa como el “IV PODER”. 
Y como a menudo sucede, cuando se defienden derechos fundamentales al precio de censura, prohibiciones de publicar, impuestos, multas y cárcel, la combativa prensa inglesa evolucionó más pujante, rápida y dinámica, en variedad y contenido, que la prensa del  resto de los países europeos. (Albert. P. Histoire de la Presse. PUF. 1978).
Más de 200 años después; en una Costa Rica nacida a la democracia al alero de la libertad de expresión, el TRIBUNAL SUPREMO DE ELECCIONES (T.S.E.), pretendió, con un proyecto de ley reformar el Código Electoral para recetarle cárcel a los directores de los medios informativos (prensa, radio-noticiarios y noticiarios televisuales) si publicaban encuestas, durante el período de “veda electoral”.
De nuevo, las encuestas en la palestra de la Opinión Pública. Aunque por existir una desproporcionada relación entre la magnitud del castigo propuesto por el TSE y la naturaleza del delito, las encuestas, esta reforma fue rechazada de facto.
Quizás gravite por los pasillos del Alto Tribunal Electoral, el antecedente marcado por un noticiario de TV dirigido por  el periodista Guillermo Fernández que difundió  a las 3:30 p.m. una encuesta de CID-GALLUP dando por presidente electo a Miguel Ángel Rodríguez frente a José Miguel Corrales el mismo día de las elecciones, cuando aún faltaban ¡más de dos horas para el cierre de las urnas! Y cuando los “máximos” de su comando de campaña liderados por Constantino Urcuyo no podían esconder el miedo que sentían ante la inminente derrota que percibían con los signos externos, la afluencia de votantes y los sondeos de sitio que realizaban en los centros de votación. Y no era para menos el miedo que sentían los social cristianos, pues si en enero de 1998 una encuesta de CID-GALLUP le daba a Miguel Ángel Rodríguez una ventaja de 250 mil votos sobre José Miguel Corrales (con36% para el primero frente a 24% para Corrales y de igual manera UNIMER le daba a Rodríguez una ventaja del 10,2%  la verdad es que el día de las elecciones, Rodríguez obtuvo apenas 33.326 votos más que José Miguel Corrales (652.160 votos para Rodríguez y 618.834 para Corrales. Ahora bien, Guillermo Fernández, en un inusual avance de noticias de TN7 declaró que Miguel Ángel Rodríguez aventajaba a José Miguel Corrales con un 10%. 
Y como si hubiera recibido un shock de muerte política, a partir de esa hora, José Miguel Corrales no apareció más en los espacios televisuales y radiofónicos.
Al final de la jornada, a escasos minutos del cierre de las urnas, caso insólito en la historia de los procesos electorales nacionales, Corrales reconoció el triunfo de Miguel Ángel Rodríguez.
Doy fe que cuanto aquí se escribe ocurrió, pues durante el 1 de febrero de 1998 realicé un monitoreo de radio y televisión de todo el proceso electoral como parte del curso de análisis de mensajes que impartía en la Escuela de Comunicación San Judas Tadeo, de la Universidad Federada. Esta práctica se realizó en el telenoticiario de Canal 2 dirigido para entonces por Adriana Nüñez. 
Este caso, insólito en la historia de los procesos electorales costarricenses no recibió ninguna sanción por parte del TSE ni hubo protesta alguna por parte de los grupos contestatarios nacionales.
Por otra parte, el pasado referendo por el TLC nos enseñó “cuán volátiles” son los compromisos  de los encuestados, como para cambiar de opinión con algunos días  de diferencia entre una encuesta y otra. Cito, a manera de ejemplo:
De acuerdo con una encuesta de UNIMER publicada por el diario La Nación el 4 de octubre del 2007, fueron las mujeres y los jóvenes, así como las personas con estudios primarios, de ingresos económicos bajos y cuyas edades oscilaban entre los 30 y los 39 años quienes inclinaron la tendencia a favor del NO. Pero estos mismos sectores mostraban en agosto del 2007, un fuerte respaldo al SÍ. Estos datos van aparejados con la percepción del 31% de la población que consideraba, en setiembre de ese mismo año,  que la aprobación del TLC generaría perjuicios. Varios días después (el 4 de octubre), ese mismo porcentaje había aumentado al 38%. Y quienes opinaban que el TLC le producirá beneficios bajaron de un 31% a un 26%.
Si a escasos tres días, el NO al TLC aventajaba al SÍ por 12 puntos porcentuales; ¿qué sucedió en ese ínterin para que triunfara el SÍ, por 50 mil votos?
Desde finales de los años 30 y a propósito del programa radiofónico “La guerra de los mundos” (producido y actuado por Orson Welles) que provocó un pánico generalizado en todos los Estados Unidos, H. Cantrill, sociólogo norteamericano demostró la existencia de “pautas de enjuiciamiento”, asociadas a niveles socioeconómicos, educativos y de conocimiento del contenido de las informaciones. Su principal hallazgo dice: “Se produce pánico cuando un valor altamente estimado y generalmente aceptado se ve amenazado; y cuando no existe, a la vista, ninguna eliminación de la amenaza. El pánico surge cuando el ego de las personas está profundamente implicado en la situación creada y se siente en la total incapacidad para aliviar  o controlar las consecuencias del hecho”.
Han transcurrido 15 años desde la fecha en que un telenoticiario se atrevió a enfrentar abiertamente al Tribunal Supremo de Elecciones. En este caso, como a lo largo de esa elección se publicaron más encuestas que nunca antes ni después se publicarían con tanta insistencia. Este hecho inédito reflejaba un miedo disfrazado por parte de los grandes dueños del capital en Costa Rica.
Si la tal encuesta no se hubiera difundido en el momento clímax de ese proceso electoral quizás José Miguel Corrales habría sido el presidente electo. Recuérdese que es durante el período de las 3:00 p.m. a las 6:00 p.m. cuando los indecisos resuelven el destino final de una elección. Tampoco se podrá afirmar que el triunfo de Rodríguez se debió a la difusión anticipada de esta encuesta. Lo que sí es cierto es la sabia posición de Alain Touraine, reconocido sociólogo francés cuando afirma que las encuestas son “simple instrumento entre otros”, que conviene utilizar en casos bien precisos. Y advierte a los usuarios de tal instrumento de “no dejarse obnubilar por la impresión de verdad inmanente que le confieren la representación estadísticamente probada de las muestras consultadas” (analogonluis@yahoo.es)