EL ARTE DE MANIPULAR LA NOTICIA CON TÍTULOS HIPOTÉTICOS
Dr. Luis Montoya Salas
Comunicólogo
El 17 de agosto recién pasado, CR. Hoy, medio informativo electrónico tituló “ESPOSA DE JHONNY ARAYA ELEGIRÁ DIPUTADOS”. El 1 de junio de 1998, el periódico La Nación tituló: “EX – SOCIO DE FISHMAN LIGADO A CAPO”.
Ambos títulos tienen en común utilizar partes irrefutables de la noticia y asumirlas en el título como un todo verdadero, cuando: si algunas partes de la noticia son irrefutables, no necesariamente el título lo es. Y por el contrario, existen más posibilidades que el título sea hipotético. Pues en periodismo no se aplica la ley de la Psicología de la Gestalt según la cual “El todo es más que la suma de sus partes”.
El presente ensayo procura demostrar que existen procedimientos propios de la naturaleza periodística de la puesta en forma final de una noticia susceptibles de inducir a una percepción errónea de la verdad.
La función de anclaje de los títulos y las ilustraciones
La Psicología de la Percepción estudió profusamente el efecto y resultado de la distribución de los elementos en un espacio determinado. Y para el caso del material impreso demostró, entre otros principios:
1. La parte superior y derecha (de cara al perceptor) son jerárquicamente las de mayor valor. Y esto, por cuanto en la cultura occidental leemos de arriba hacia abajo y de izquierda a derecha.
2. Un texto (título) adquiere mayor valor y jerarquía en el marco de una información si cuenta con una ilustración. Así, la ilustración es una prolongación visual del texto, lo complementa y lo refuerza. Por otra parte, la ilustración rompe la monotonía de un texto abundantemente idéntico perceptualmente. La ilustración cumple un principio elemental de la información y es el de agregar algo diferente, inédito al texto mismo. La ilustración juega entonces el papel de pretexto para el texto. Y en este siglo de la imagen resulta inadmisible que una noticia o reportaje no se complemente con fotografías o ilustraciones.
3. De acuerdo con la Psicología de la Gestalt, las formas (título, texto, pie de grabado) son percibidas como una totalidad, aportándole una alta dosis de redundancia que refuerza la función persuasiva de cada parte, por separado.
4. Los títulos cortos (no más de 7 palabras) redactados con palabras simples, las más usuales y más cortas parecen poseer una cualidad de “atrapar” al perceptor y son reconocidas más fácil y rápidamente. (F. Richaudeau: Le langage efficace. P. 37)
En una página impresa de periódico existen tres elementos estrechamente entrelazados e interdependientes: El título, las fotos con sus pies de grabado y el texto de la noticia o reportaje.
Cada uno de ellos cumple una función específica: El título es el QUÉ de la noticia llevado al extremo de su síntesis. Entre más breve, más eficaz para los efectos de capturar, atraer la atención y memorizar el mensaje. En tal sentido, la psicología de la gestalt le da sustento empírico a la práctica periodística de titular: las palabras más simples, más usuales y más cortas parecen poseer una cualidad de “atrapar” al perceptor y son reconocidas más fácil y rápidamente. La razón es simple: el título aplica la ley del mínimo esfuerzo del perceptor. Las imágenes fotográficas cumplen una función de redundancia respecto del título reforzando así, el efecto persuasivo pretendido por el jefe de información del medio periodístico. Lo que dice el título debe estar plasmado en las fotos que lo ilustran para hacer innecesaria la lectura del texto. Y esto, aplicando nuevamente la ley del mínimo esfuerzo.
Nuevamente recurro a la psicología de la percepción y los estudios extensos realizados sobre la tendencia del ser humano a percibir las formas como totalidades. En el caso del título, las fotos y el texto estos son percibidos globalmente; y con mayor énfasis, el título y las fotos porque rompen la monotonía de la composición visual de una página abundante en texto. Esto explica por qué basta al perceptor con leer el título y apoyarse en las ilustraciones gráficas para asumir que leyó la totalidad de la noticia. La función subyacente del texto o cuerpo de la noticia es demostrar, per se, la veracidad del título y de las fotos. Y si logra que el perceptor no continúe leyendo la noticia habrá alcanzado su objetivo, aunque parezca paradójico.
Dos casos de especie para ilustrar la teoría
La Asociación Internacional para la Investigación Interdisciplinaria de la Comunicación propone las siguientes categorías para establecer el grado de certeza de los intercambios de comunicación: Los hechos irrefutables, los hechos probables, los hechos hipotéticos y los hechos falsos.
Cada una de estas categorías no son absolutas en sí mismas, aunque se fundamentan en 6 preguntas elementales: ¿Quién? ¿Qué? ¿Cuándo? ¿Dónde? ¿Cómo y para qué? enunciadas por Quintiliano hace más de 2000 años. Cada una de ellas encierra más que un acto mecánico, una profunda ideología pues “se inscriben en el núcleo mismo del SENTIDO COMÚN, instrumento inherente al ser humano, con el cual percibe las señales del devenir cotidiano y toma sus decisiones” (Montoya Luis: Prensa y Parlamento. (Pp. 22-25. Año 2.000 Documento inédito). Así, por ejemplo, el Quién de Quintiliano no es tan inocente: “En el quién de la fuente subyacen representaciones simbólicas del poder, que el periodista adapta a su personal y propia imagen. Esta relación biunívoca: fuente (que también percibe estímulos lanzados por el periodista) y periodista definirá, en buena medida, los niveles de veracidad y calidad de los hechos” (Montoya, Luis, ob. Cit. P. 23).
“ESPOSA DE JHONNY ARAYA ELEGIRÁ DIPUTADOS”.
En 6 párrafos, de los cuales sólo uno hace referencia a la ex esposa de Jhonny Araya, el redactor de esta noticia envía un mensaje subyacente: “Esposa de Jhonny Araya será candidata a diputada.
En estricto sentido, Sandra León, esposa del candidato presidencial liberacionista representa un solo voto entre 247 que constituyen la Asamblea que elegirá a los diputados. No obstante, la semántica del texto en el plano de las significaciones (denotaciones + connotaciones) le asigna a esta delegada un poder superior al de los 246 delegados restantes. Así, una sola persona que no es siquiera el candidato representa, de acuerdo con el título de la noticia, la suma absoluta de todas las partes que componen la asamblea, también con un poder absoluto sobre todos los delegados. Es cierto, sí, que Sandra León forma parte de la Asamblea que elegirá a los diputados. Pero es falso que ella sea la única, con la exclusión de todos los demás con el poder que le otorga el título periodístico.( Aclaro que en estricto sentido semántico, es correcto hablar de título y no de titular, que tiene otra connotación).
En el plano de las connotaciones subyace una intención del medio de sancionar el autoritarismo del candidato Jhonny Araya al nombrar a dedo una persona con menos méritos trayectoria y compromiso partidario, con el único argumento de ser su esposa. Esto revela, aplicando una lógica simplista, que la esposa de Jhonny Araya ejerce hoy sobre el candidato un poder real similar al que tiene la esposa de Daniel Ortega, Presidente de Nicaragua, con todas sus implicaciones, si llegara a la presidencia.
Esta es, en síntesis, una forma del periodista de materializar su ideología subyacente respecto de lo que piensa sobre el acto arbitrario por parte del candidato presidencial liberacionista al nombrar “a dedo”, a su esposa como integrante de la Asamblea.
“EXSOCIO DE FISHMAN LIGADO A CAPO”.
Este caso es más delicado por sus implicaciones políticas y legales. Y revela una posición de política editorial (aclárese que no es línea editorial) del medio informativo. Aquí, las 355 líneas de texto del cuerpo de la noticia son ciertas, en sus párrafos; pero no sustentan el valor irrefutable del título. Fishman fue socio de un ex – socio de José Nelson Urrego Cárdenas, sin el adjetivo peyorativo de “capo”, cuyo significado no explican las dos periodistas responsables de lo que ellas llaman “INFORME ESPECIAL”.
Por otra parte, en el momento de la publicación, Luis Fishman, a la sazón Presidente de la Asamblea Legislativa no tiene ningún ligamen empresarial con el ex - socio del ex - socio Urrego Cárdenas. Pues “tan pronto se enteró de sus nexos vendió los títulos y renunció al puesto de presidente (…)
Aquí, el reportaje no tendría ningún valor periodístico si no es por la figura pública de Luis Fishman en calidad de Presidente de la Asamblea Legislativa. Ex – socio, ya lo fue. No lo es en el momento de publicación del reportaje. Y las periodistas mismas así lo afirman. No obstante, tienen un abundante material investigativo que deben difundir.
Como se indicó en párrafos anteriores, la composición gráfica del conjunto: título EXSOCIO DE FISHMAN LIGADO A CAPO; fotografía en recuadro de Urrego Cárdenas; otra de una inmensa construcción hotelera valorada en $50 millones a la par de la fotografía de Luis Fishman cumplen la función gestáltica de impresionar la percepción de los lectores quienes realizarán la síntesis, en forma de silogismos: Los perceptores asociarán: Fishman – capo – hoteles - riqueza, Miami - inversión, millones de dólares. El resto sería voluntad de los perceptores de corroborar el valor irrefutable del título.
Para contrarrestar las implicaciones del “INFORME ESPECIAL”, las periodistas se cuidan de entrevistar al implicado, quien sale muy mal librado de la entrevista, al punto de perder el control cuando descubren su ingenuidad, descuido y falta de profesionalismo imperdonables en un abogado con su experiencia y conocimientos. Pero aun con la entrevista, las periodistas solo pueden titular vagamente, pues en estricto sentido, no pueden demostrar nada más que una duda razonable del vínculo de Fishman con un ex – socio de otro ex – socio.
Ahora bien; si como está demostrado en teoría periodística: “El material impreso lleva consustancialmente el sello de la verdad. Y esto es cierto con mayor razón si ya existe en el imaginario colectivo una praxis de consumo de noticias paralela al grado de credibilidad que les merecen sus medios informativos” (Montoya, Luis: ob cit.), esta publicación tuvo daños directos y “colaterales” sobre la imagen pública del diputado Luis Fishman. No se prueba, no se demuestra nada, pero queda sembrada la duda.
Algunos apuntes conclusivos:
En la comunicación humana interpersonal, el periodista no puede desprenderse de su ideología: prejuicios, intereses, intenciones. Y a diferencia de sus fuentes tiene el poder de determinar el resultado final de su trabajo periodístico con sus implicaciones a posteriori, sobre la fuente que le nutrió de información. Dicho en concreto: en algunas ocasiones, el periodista utiliza un hecho noticioso como pre-texto para exteriorizar su propia visión respecto del hecho y del o los personajes involucrados.
Y esto es posible, porque el perceptor desconoce tanto la coyuntura como la estructura de los hechos noticiosos que consume. Y el periodista no cuenta con espacio ni tiempo (y quizás de conocimiento) para contextualizar a sus perceptores. Esto no significa que tanto la coyuntura como la estructura deban someterse al poderoso devenir de las circunstancias propia de las noticias. La coyuntura, por ejemplo es tan dinámica como los hechos noticiosos mismos. Podemos lograrlo, distanciándonos de la apariencia (retórica) que envuelve al hecho noticioso y desmenuzarlo en los componentes esenciales de orden político, económico, ideológico, en suma, de las instancias del poder.
El periodista, quizás más que ningún otro profesional debe contar, entre sus cualidades, características, actitudes y aptitudes, con un sentido del equilibrio emocional tan fuerte que no sucumba ante las arremetidas emocionales de sus fuentes de información, ni quede subyugado por la impresión perceptual de poder que emana de algunas de aquellas.
En cuanto a los perceptores, deberían ejercitar aunque sea empíricamente su percepción para identificar los casos de información tendenciosa y sospechar, siempre, de la orientación y sentido de las noticias.
El diagrama revela que las interacciones son de orden empresarial, no de tráfico de capitales ni lavado de dólares.