EL PROBLEMA DEL COMERCIO ILÍCITO
La participación de
la industria tabacalera (it) a la luz
del artículo 5.3 del Convenio Marco de la OMS para el Control de Tabaco (CMCT)
resulta improcedente y por tanto no debe participar en el desarrollo e implementación
de políticas y estrategias para enfrentar el comercio ilícito.
ESTRATEGIAS DE LAS
TABACALERAS PARA ENFRENTAR AL MINISTERIO
DE SALUD DE COSTA RICA
Es natural (desde el organismo empresas tabaqueras y
tabacaleras) y lógico (desde el ángulo empresarial y misión del mercado)
utilizar todas las armas, trillos y recursos
argucias que la institucionalidad les permite para boicotear y minar las
regulaciones impuestas a la industria tabaquera; y en particular a la venta
para el consumo del tabaco en sus más diversas formas. En esta estrategia
invierten sumas multimillonarias
incluidas las tácticas de “penetrar” de la forma más anodina y hasta
ingenua las estructuras administrativas
responsables para neutralizar y controlar las oficinas responsables de
ejecutar las acciones en contra del fumado.
En la táctica de guerra del espionaje el clímax se alcanza
cuando se logra infiltrar a un servil en el corazón mismo de la estructura
oficial controladora del consumo del tabaco. No extraña, por tanto, que esto suceda en los
casos de la AMCHAM y la Cámara de Industrias de Costa Rica.
Las empresas tabacaleras constituyen consorcios mundiales
profundamente enraizados en la economía global que consideran al sistema
oficial de control como un enemigo de las prácticas más liberales bajo el
supuesto de que el mercado es tan libre
como libres son los consumidores de escoger. Y ese enemigo debe desaparecer
mediante la descalificación, la humillación,
la inoperancia.
Si yo fuera asesor de una empresa transnacional del tabaco
recomendaría inundar de cigarrillos de contrabando un país como Costa Rica, con
una legislación frágil para
contrarrestar las campañas de salud y hacer caer los índices de éxito contra el fumado. Estas empresas invierten miles de millones de
dólares buscando alternativas para neutralizar y anular las batallas que Costa Rica gana contra las trasnacionales del tabaco.
Y conocen la idiosincrasia del tico y la forma de operar de
la administración y son capaces de inducir en todo un país que el problema del
aumento de muertes son causadas por el contrabando y no por el consumo legal de
los cigarrillos. Es, a todas luces, una
estrategia perversa…
Resulta sospechoso que la misma industria tabaquera ofrezca
los sistemas de control para detectar el tabaco… Y coincido con RENATA que su eficacia es una cortina de humo para
ejercer un control en el origen mismo del problema: el contrabando. Es como decir, yo “financio el sistema de
control, pero me deja a mí operarlo”.
Coincido también con RENATA. ¿Cómo pretende la Cámara de
Industrias de Costa Rica decirle al Poder constituido lo que debe hacer, cuando
su misión está restringida al ámbito de una Cámara que defiende los intereses
de sus agremiados?
·
RENATA alerta a la sociedad
costarricense en la misma dirección de
su misión y objetivos. Y lo hace con argumentos, con hechos probados y
desenmascara la complicidad de Comisión Mixta de Control del Comercio Ilícito -que coordina el
Ministerio de Hacienda- al incluir ilegítimamente a dos organizaciones que
promueven las estrategias de la it,
Amcham y UCCAEP, que hoy son juez y parte.